A fight for love and glory
A case of do or die
The world will always welcome lovers
As time goes by
Cada década tiene un ícono que alimenta las fantasías y pesadillas de la cultura contemporánea, fueron unos rebeldes contra el destino, y nos dejaron como legado discos inolvidables, frases de leyenda en una película, un vestido negro, unos guantes de box, el vértigo, y un par de Converse para correr en las madrugadas.
Por eso forman parte del imaginario colectivo y cada cierto tiempo la industria de la moda los rescata en las inspiradas ediciones fotográficas que dan la vuelta al mundo.
¿Cómo devolverles el talento, la gracia y su paso por este mundo? Quizá recordando el valor de un sueño, de su trabajo, y porque son simplemente únicos.
Solo nos dejaremos llevar en un pequeño paseo con Audrey Hepburn en Breakfast at Tiffany´s con sus grandes lentes negros, su aparente fragilidad y su imprescindible vestido negro, unos años después, en 1976, Rocky Balboa despertaba en la madrugada, a pesar del frío, para iniciar sus entrenamientos heroicos entre los suburbios acompañado de sus clásicas Converse.
Brigitte Bardot es la musa que aún se evoca en editoriales por Kate Moss, o en la campaña alegre de la firma Guess en los años 90 con Claudia Schiffer como la copia casi perfecta de la diva francesa.
Por eso forman parte del imaginario colectivo y cada cierto tiempo la industria de la moda los rescata en las inspiradas ediciones fotográficas que dan la vuelta al mundo.
¿Cómo devolverles el talento, la gracia y su paso por este mundo? Quizá recordando el valor de un sueño, de su trabajo, y porque son simplemente únicos.
Solo nos dejaremos llevar en un pequeño paseo con Audrey Hepburn en Breakfast at Tiffany´s con sus grandes lentes negros, su aparente fragilidad y su imprescindible vestido negro, unos años después, en 1976, Rocky Balboa despertaba en la madrugada, a pesar del frío, para iniciar sus entrenamientos heroicos entre los suburbios acompañado de sus clásicas Converse.
Brigitte Bardot es la musa que aún se evoca en editoriales por Kate Moss, o en la campaña alegre de la firma Guess en los años 90 con Claudia Schiffer como la copia casi perfecta de la diva francesa.
Humprey Bogart con la mirada de caballero herido y comportamiento indiferente en Casablanca se reencuentra con Ingrid Bergman en el Café de Rick, para ellos siempre quedará París, a pesar de que por la causa de los aliados deben decirse adiós en plena Segunda Guerra Mundial
David Bowie el héroe cósmico, Ziggy Stardust, maestro del Glam Rock tuvo todas las vidas posibles en la tierra, y ahora y por siempre el Duque Blanco es un príncipe en Space Oddity.
Debbie Harry no tuvo miedo cuando los chicos conquistaban el reino punk, no perdió un ápice de femineidad, y con un par de tacos, casacas de cuero y medias rotas cantaba en CBGB, con aquel estilo que fue copiado por Madonna, y cuando la estrella de la chica Call Me se perdía otros la buscaban hambrientos de fama.
1,2,3,4. Porque los 70´s tuvieron un antes y un después de Los Ramones con sus canciones y su rebeldía, y gracias a ellos la desdicha de los chicos de la calle tuvo banda sonora, todo dolía pero todo también se podía cambiar con el puño en alto y con un militante de los jeans rotos, las tachas y el cuero. Casi todos partieron pero el Blitzkrieg Bop se escucha en la eternidad.
David Bowie el héroe cósmico, Ziggy Stardust, maestro del Glam Rock tuvo todas las vidas posibles en la tierra, y ahora y por siempre el Duque Blanco es un príncipe en Space Oddity.
Debbie Harry no tuvo miedo cuando los chicos conquistaban el reino punk, no perdió un ápice de femineidad, y con un par de tacos, casacas de cuero y medias rotas cantaba en CBGB, con aquel estilo que fue copiado por Madonna, y cuando la estrella de la chica Call Me se perdía otros la buscaban hambrientos de fama.
1,2,3,4. Porque los 70´s tuvieron un antes y un después de Los Ramones con sus canciones y su rebeldía, y gracias a ellos la desdicha de los chicos de la calle tuvo banda sonora, todo dolía pero todo también se podía cambiar con el puño en alto y con un militante de los jeans rotos, las tachas y el cuero. Casi todos partieron pero el Blitzkrieg Bop se escucha en la eternidad.
Y a pesar de su cara de loco y con los ojos en otro mundo, Kurt Cobain fue fiel a sus camisas de leñador a sus chompas rotas, con la imagen más honesta que la industria musical pudo concebir (claro Kurt golpeaba el cerebro de todos), fue el trovador desquiciado de toda una generación X, Y,Z, hasta que ya cansado de cargar con sus fantasmas y con los de millones se pegó un balazo un 5 de abril de 1994. Kurt es ahora un ángel de fuego.
Marilyn y Chanel N·5, Marilyn y The Seven Year Itch y el vestido blanco que de forma maliciosa se levantaba en plena vía pública, ella como siempre se reía, es solo un juego chicos. Marilyn Monroe en la película Gentlemen Prefer Blondes, en los cuadros de Andy Warhol, en sus fotos felices, y hasta cuando fue una actriz del método de Lee Strasberg. Hay tantas cosas sobre ella, una imagen que nunca se agota.
El chico dinamita de The Beatles, John Lennon por siempre, desde sus trajes de londinense chic, hasta desnudo con Yoko por la paz mundial. Todos creían en él, todos todavía lo siguen.
Kim Novak tratando de no caer en Vértigo acompañada por un atormentado James Stewart en una de las tantas locuras que nos dejó Alfred Hitchcock, las aves y las alturas, las ventanas indiscretas que ocultan un misterio.
Madonna con el cinturón de Boy toy, por las calles de Venecia con un león, bruja electrónica, chica con pantalones en Express Yourself, geisha, María Antonieta, y podríamos seguir, porque ella es la reina incansable.
Marlon Brando fue el desalmado Stanley Kowalski que como un huracán destruía a todo ser vivo en Un Tranvía llamado Deseo, y la pantalla quedó bajo su hechizo, y una simple camiseta blanca se convirtió en un clásico, su voz como el venerado jefe de la mafia en El Padrino todavía se escucha, Vito Corleone no jugaba a los policías y ladrones.
Marilyn y Chanel N·5, Marilyn y The Seven Year Itch y el vestido blanco que de forma maliciosa se levantaba en plena vía pública, ella como siempre se reía, es solo un juego chicos. Marilyn Monroe en la película Gentlemen Prefer Blondes, en los cuadros de Andy Warhol, en sus fotos felices, y hasta cuando fue una actriz del método de Lee Strasberg. Hay tantas cosas sobre ella, una imagen que nunca se agota.
El chico dinamita de The Beatles, John Lennon por siempre, desde sus trajes de londinense chic, hasta desnudo con Yoko por la paz mundial. Todos creían en él, todos todavía lo siguen.
Kim Novak tratando de no caer en Vértigo acompañada por un atormentado James Stewart en una de las tantas locuras que nos dejó Alfred Hitchcock, las aves y las alturas, las ventanas indiscretas que ocultan un misterio.
Madonna con el cinturón de Boy toy, por las calles de Venecia con un león, bruja electrónica, chica con pantalones en Express Yourself, geisha, María Antonieta, y podríamos seguir, porque ella es la reina incansable.
Marlon Brando fue el desalmado Stanley Kowalski que como un huracán destruía a todo ser vivo en Un Tranvía llamado Deseo, y la pantalla quedó bajo su hechizo, y una simple camiseta blanca se convirtió en un clásico, su voz como el venerado jefe de la mafia en El Padrino todavía se escucha, Vito Corleone no jugaba a los policías y ladrones.
Roxy Music, conformado por Bryan Ferry, Phil Manzanera y Brian Eno, eran locos, geniales, coloridos, elegantes y extraños.
No sé si Lady Gaga sobreviva pero ha marcado la parte final de la década, con su Poker Face la chica que a veces adora ser un monstruo debe reconocer que sus maestros son Peter Gabriel y David Bowie más allá de los corset de Madonna y las odiosas comparaciones. Lady Gaga con su voz especial y su piano puede encontrar un increíble destino.
No sé si Lady Gaga sobreviva pero ha marcado la parte final de la década, con su Poker Face la chica que a veces adora ser un monstruo debe reconocer que sus maestros son Peter Gabriel y David Bowie más allá de los corset de Madonna y las odiosas comparaciones. Lady Gaga con su voz especial y su piano puede encontrar un increíble destino.
Finalmente Michael, tú que has sobrevivido todas las décadas sigues bailando en la luna, nos sonríes y giras.
Me encantó el artículo!! un impecable estilo!!! besos!
ResponderEliminar¡Qué lindo comentario! Muchas gracias. ; )
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